Desde una llama humana y pasional, emerge el reflejo de nuestra propia sombra
-aquella que sin luz, no existiría-.

.:::. Hay quienes dicen que la verdadera luz es transparencia, por lo que no puede ser reflejada; ya que es todo y nada, a la vez .:::.

Este fuego humano, mundano y finito. Fuego denso, corpóreo. Peligroso y sustancioso: ES reflejo y REFLEJA. . .
Y es la huella de la transformación del ardor, causado por su espejada condición, la que va trazando el rumbo:
forjando el aprendizaje.

miércoles, 13 de abril de 2011

suspendidos


Suspendidos en el tiempo .- Magaly Quirós

Me rio
porque vos
ya sabés
que yo sé.

Sabés que
no hay pieles,
que no hay límites.

Sabés que siempre
estamos habitando
ese otro espacio.

Nunca se corta
la conversación.

...y acá ya no somos
ni seremos los mismos.


Pero allá
y acá también,
siempre se "es".