Desde una llama humana y pasional, emerge el reflejo de nuestra propia sombra
-aquella que sin luz, no existiría-.

.:::. Hay quienes dicen que la verdadera luz es transparencia, por lo que no puede ser reflejada; ya que es todo y nada, a la vez .:::.

Este fuego humano, mundano y finito. Fuego denso, corpóreo. Peligroso y sustancioso: ES reflejo y REFLEJA. . .
Y es la huella de la transformación del ardor, causado por su espejada condición, la que va trazando el rumbo:
forjando el aprendizaje.

jueves, 27 de mayo de 2010

en busCa de las griEtas.-


Una rutina
que,
a veces,
apaga los
despertares.

Y una lucha
constante
por desemembrarla,
por derrumbarla.

Por quebrarla
desde dentro,
quitándole la forma.

Por dejar entrar
el sol,
a través de las grietas
provocadas
por puñaladas
de vida,
que laten internamente,
procurando romper
la sólida cárcel.

Grietas
que hacen el intento
de no dejar
que el sueño
venza;
y se haga costumbre.
De no dejar
que la muerte
vaya paseando
los rededores,
vistiendo los ahoras
de estancamiento.

Opacando los colores

y llevándose consigo

el fresco
aroma
de brillantes
novedades.