Desde una llama humana y pasional, emerge el reflejo de nuestra propia sombra
-aquella que sin luz, no existiría-.

.:::. Hay quienes dicen que la verdadera luz es transparencia, por lo que no puede ser reflejada; ya que es todo y nada, a la vez .:::.

Este fuego humano, mundano y finito. Fuego denso, corpóreo. Peligroso y sustancioso: ES reflejo y REFLEJA. . .
Y es la huella de la transformación del ardor, causado por su espejada condición, la que va trazando el rumbo:
forjando el aprendizaje.

jueves, 26 de agosto de 2010

como airE.-


Boshier,Christine
BODEGÓN VACÍO (1336) Óleo sobre lienzo 50 x 50 cm. 2007





Surcando lo hondo
buscaba la transparencia.
Porque en lo hondo
no hay luz,
ni hay sombra.

Surcando lo hondo
me supe sin fondo.

Y el misterio
de la oquedad
quedó flotando

como aire,
hojas
o suspiros.