Desde una llama humana y pasional, emerge el reflejo de nuestra propia sombra
-aquella que sin luz, no existiría-.
.:::. Hay quienes dicen que la verdadera luz es transparencia, por lo que no puede ser reflejada; ya que es todo y nada, a la vez .:::.
Este fuego humano, mundano y finito. Fuego denso, corpóreo. Peligroso y sustancioso: ES reflejo y REFLEJA. . .
Y es la huella de la transformación del ardor, causado por su espejada condición, la que va trazando el rumbo:
forjando el aprendizaje.
-aquella que sin luz, no existiría-.
.:::. Hay quienes dicen que la verdadera luz es transparencia, por lo que no puede ser reflejada; ya que es todo y nada, a la vez .:::.
Este fuego humano, mundano y finito. Fuego denso, corpóreo. Peligroso y sustancioso: ES reflejo y REFLEJA. . .
Y es la huella de la transformación del ardor, causado por su espejada condición, la que va trazando el rumbo:
forjando el aprendizaje.
viernes, 20 de agosto de 2010
verdOres en pasaDo.-
ALVARADO ANTONIO Fuerza Verde Óleo, 33 1/2 x 42 1/2 1963
El remanente
de algún olvido
vocifera,
algunas tardes,
su no muerte.
Sale a caminar
despacio y sigiloso,
recorriendo los bordes
de los ahoras.
Carga la estela
de la esperanza
muerta
/los lienzos etéreos
de su fantasma/.
Tiñe de verde
las catedrales
del tiempo,
y las sumerge
entre el nunca
y el siempre.
Rezuma
a ciegas
perfumes viejos,
de una seca
humedad
empalagosa y
se jacta de
saberse como un
musgo
oculto entre lo
muerto, y
siempre vivo.