
Energía ultraterrena.
Profunda,
circular.
Magnética vacuidad
que abarca
y llena
el espacio,
desde su condición
subterránea.
Lucha pacífica
pero inclaudicable.
Juego energético
que se complementa
alternando roles.
Individualidades incompatibles
que se amalgaman,
y circulan en armonía.
Una armonía dada
por la propia fuerza,
por la propia condición
mística y matriarcal
de nuestro sexo.
Impenetrable misterio.
Interminable.
Todo llega a nuestros ojos.
Porque miramos
con el instinto.
Intuición ancestral.
Mujer Chamana.
Nuestra unión
puede ser tan poderosa,
que aterra.
/Solo la impecabilidad puede
dar uso correcto
del poder dado
como condición nata./